Elsa López Torres, una mujer de 83 años residente en la comuna de El Tabo, se ha convertido en un ejemplo de perseverancia y superación personal tras titularse como técnico en Trabajo Social en el Instituto Profesional AIEP de San Antonio, región de Valparaíso.
La historia de Elsa comenzó cuando, a sus 13 años, se vio obligada a abandonar sus estudios para trabajar y apoyar a su familia. Sin embargo, su deseo de continuar aprendiendo nunca desapareció. A los 75 años, cumplió su primer gran objetivo al obtener su licencia de enseñanza media, pero su verdadero sueño era acceder a la educación superior, algo que no fue fácil de lograr.
“Hubo varias instituciones de educación superior que no me permitieron matricularme”, confesó Elsa en una entrevista con Canal 2 de San Antonio. A pesar de estos obstáculos, no se rindió y finalmente logró inscribirse en el Instituto Profesional AIEP, donde inició su carrera como técnico en Trabajo Social.
Elsa se enfrentó a múltiples desafíos a lo largo de su formación académica, desde adaptarse a los cambios en el sistema educativo hasta superar las barreras tecnológicas. Sin embargo, su determinación la llevó a superar cada dificultad, convirtiéndose en una fuente de inspiración para sus compañeros y para su comunidad.
“No me creían capaz, pero yo siempre supe que lo lograría. Siempre tuve la voluntad de seguir adelante y cumplir mi sueño”, comentó emocionada durante su ceremonia de graduación.
La vida de Elsa es una muestra de que nunca es tarde para alcanzar los sueños, y su logro ha generado un fuerte impacto en la comunidad de San Antonio, donde es vista como un ejemplo de que la edad no es un impedimento para aprender y superarse. Con su título en mano, Elsa está decidida a seguir contribuyendo a su entorno, utilizando sus nuevos conocimientos para ayudar a los demás.
Su historia es una lección de vida, que demuestra que, con esfuerzo y perseverancia, cualquier meta puede ser alcanzada sin importar la edad
